Aseos para niños: comodidad para su hijo

A pesar de las numerosas adaptaciones de los sanitarios infantiles, todas ellas no son tan cómodas y fiables como los sanitarios especiales de tamaño reducido. Debido al tamaño del inodoro para adultos, el niño puede tener miedo a caerse, lo que forma una actitud negativa hacia este tipo de aparatos sanitarios y provoca el desarrollo de fobias.
"Pros y contras de los aseos para niños
Uno de los más El tamaño del cuerpo de un preescolar es una ventaja importante. Es cómodo para que el niño se siente y hay confort psicológico. La altura hace que sea fácil alcanzar el botón de descarga, lo que enseña a su hijo independencia y responsabilidad y facilita el destete.
La altura del inodoro es mucho más segura de usar. No hay riesgo de resbalar, de tropezar con un escalón o de saltar y golpear la taza. Es importante tener en cuenta que las fijaciones especiales de plástico no son especialmente duraderas.

No hay que olvidar la esterilidad de este lugar. Un cuenco de loza o porcelana es fácil de lavar y mantener limpio, ya que está tratado con diversas composiciones antibacterianas, mientras que el plástico no tolera las sustancias abrasivas y agresivas.
Las desventajas son:
- corto periodo de uso - los niños crecen rápidamente, y ya un niño de 7-8 años puede utilizar con seguridad una taza de inodoro para adultos;
- Espacio adicional en el cuarto de baño: si el tamaño del cuarto de baño es bastante pequeño, será un problema colocar un segundo inodoro;
- El coste - Los aseos para niños no son mucho más baratos que los de los adultos;
- El coste - Los aseos para niños no son mucho más baratos que los de los adultos.
Si es posible, puedes proporcionar un baño separado para el niño. Los inodoros para niños soportan perfectamente el peso de un adulto y, si es necesario, el baño puede ser utilizado por todos. Por supuesto, no siempre es racional para instalar un inodoro tal, especialmente en un pequeño apartamento, pero para una familia grande o un jardín de infantes - una gran opción.

Características
A menudo, los aseos infantiles difieren no sólo en tamaño, sino también en diseño. Diferentes colores, imágenes de personajes de dibujos animados, animales, etc. convierten los procedimientos de higiene en un elemento de juego, despertando el interés y levantando el ánimo. También hay modelos con dos asientos, cada uno diseñado para una edad específica del niño, lo que alarga la vida de la taza del váter.
Pero la principal diferencia es el tamaño. El inodoro para niños es mucho más pequeño, aunque soporta fácilmente el peso de un adulto. Por lo demás, los sanitarios de tamaño pequeño no difieren de los de los adultos.

Consejos para elegir
En la compra de la taza del váter puedes involucrar al niño, porque es importante que a él también le guste el diseño. Pero el criterio principal debería ser: conveniencia, edad y peso del preescolar. Es importante tener en cuenta durante cuántos años piensa utilizar esos sanitarios. Aquí, puedes elegir un inodoro un poco más grande, por así decirlo, para crecer.
En lugar de un inodoro blanco, puedes comprar uno de color. Será más divertido para tu hijo, pero también es importante tener en cuenta el diseño general del baño. Si opta por un inodoro blanco, pero quiere darle un toque de estilo, puede decorarlo usted mismo con pegatinas decorativas o utilizar un asiento de color.
La mejor elección de materiales es la loza clásica o la porcelana. El principio de la taza del inodoro es totalmente coherente con el adulto, por ejemplo, puede ser incorporado o tanque suspendido.


Instalación de WC para niños
La instalación de pequeños sanitarios no difiere de la de los adultos. La posición del WC debe ser tal que no haya problemas para acceder a los servicios. La mejor opción es colocarlo junto al WC de adultos, que ya está conectado al desagüe y al agua fría.

A continuación, se prepara la base y se coloca el subsuelo. La propia taza del inodoro se fija mediante anclajes, mortero de cemento o un adhesivo especial. Después, se conectan los servicios públicos. Es importante prestar atención a la estanqueidad de las conexiones. Una vez terminada la instalación, compruebe que el inodoro para niños no tiene fugas ni fallos de instalación.
Cuando el segundo WC ya no sea necesario, retírelo. Es aconsejable realizar este trabajo durante la renovación de todo el baño.

